
Como es comprensible, apostar por imitar la filosofía de las empresas del Lujo es una idea más que interesante hoy en día: se trata de un sector muy estratégico que genera cientos de miles de puestos de trabajo cualificado, bien remunerados y, lo que es más importante, estables a los ciclos económicos y a la agresiva competencia de los productos y servicios low cost.
Resulta necesario inspirar con estos valiosos ejemplos a los profesionales del marketing y a todo aquel que quiera desarrollar una actividad en una situación tan complicada como la actual. ¿De qué nos sirve contar con empleados mejor formados que nunca, si no estamos apostando por la innovación y el valor añadido como elementos diferenciadores?
Nunca podremos ser más baratos que las empresas que fabrican en los países donde el coste de la mano de obra es mucho menor, por lo que no nos queda otra opción que aspirar a competir a través de nuestra experiencia y del mejor servicio. Los países no tienen más remedio que defender su identidad. Ante la amenaza de la globalización tienen que luchar por proteger su tradición: Alemania no puede perder su ingeniería, Italia no puede poner su moda en peligro y en España debemos cuidar nuestro turismo, porque nuestros visitantes no tardarán en abandonarnos si el precio se con- vierte en el único elemento decisorio para elegirnos como destino en el que pasar sus vacaciones.
En una época tan complicada como la que vivimos… ¿Qué empresa no querría dirigirse a un público ajeno a los vaivenes económicos como es el del Lujo Exclusivo; o disfrutar de la fidelidad de sus clientes como hacen Apple y Starbucks; o agotar todas las entradas con meses de antelación como le ocurre a Cirque du Soleil? Tenemos que aprender a adaptar a nuestro negocio ese valor y significado propio del Lujo si no queremos convertirnos en commodities, donde el precio manda y el marketing y la creatividad brillan por su ausencia.
Aprendamos de las marcas que han sido capaces de perdurar y liderar el mercado durante más de cien años; que continúan invirtiendo en servicio y en innovación mientras el resto buscan recortar gastos y que no solo venden sino que lo hacen a un precio considerablemente superior al de sus competidores y sustitutivos. Además de contar con unos consumidores orgullosos de transmitir valores a través de ellas.
Esperamos que esté blog te haya resultado inspirador y te permita extraer las lecciones de coherencia, marketing y estrategia, que se esconden tras las firmas exclusivas. Ahora solo te queda comenzar a incorporarlas y adaptarlas de la misma forma que, como hemos visto, muchas empresas del Gran Consumo ya lo están haciendo. De lo contrario este libro no habrá aportado ningún valor y simplemente será uno más de los setenta mil títulos que cada año se publican en el mundo.
“El lujo no tiene límites, siempre conseguirá sorprendernos”
Michael Ward